jueves, 5 de mayo de 2011

Pesadillas

Anochece en mi habitación
La luna destapa las sabanas,
La cama se enfría y no hay consuelo posible que pueda encontrar
Los viejos demonios se acomodan para verte mejor,
Los monstruos salen de sus guaridas
Viajan hacia tu menta
Conquistando  los pensamientos
Y él no está…
Con mirada le buscas
Con sus manos le esperas
Y él no viene
El orgullo os consume a los dos
Pacientemente buscáis excusas para evitar cruzar el campo de batalla y reconocer vuestra derrota
Pues nadie gana enfriando el lecho
Nadie lucha…
No hay campo de batalla
Ni tampoco existe alguna guerra
Solo orgullo
Solo eso
Un estúpido y terco orgullo…
¿Existe amor?
Entonces debería ser suficiente…
¿Acaso debe interferir algo más?
¿Acaso no basta el amar el uno al otro?
Entonces porque se inventan excusas, estúpidas replicas
Palabras que no desembocan en ningún rio?
¿Por qué temo?
¿Por qué mis demonios reviven en cada sueño,
En cada centímetro de mi realidad?
¿Por que a veces he de pasar noches envuelta en la sabana de la fría indiferencia?
¿Por qué hemos de buscar una solida razón
Para escapar de cada uno de nosotros?
Una brecha que nos separe cada vez más
¿Por qué?
Mi pesadilla
Fría,
Despiadada,
Arrogante,
Inútil,
Escurridiza,
Traicionera,
La que vivo cada vez que niegas mi presencia

                                                          Rechazas mi respiración…

Esa es…
Esa es mi pesadilla

                                         Tu ausencia cuando menos la necesito.